Entre el valle de la Vera y el Valle de Ambroz se abre este profundo valle que surca Extremadura
desde el puerto de Tornavacas hasta Plasencia. Le sobran motivos para estar
declarado de interés.
Nosotros hoy vamos a recorrer la Reserva Natural de la Garganta
de los Infiernos situada en el pueblo que da nombre a todo el valle y surcada
por varias corrientes de agua que confluyen en el río Jerte.
Esta Reserva Natural es un buen amasijo de vegetación y
fauna que hace aconsejable su visita en cualquier época del año.
La parte más turística de la ruta es la denominada como Los
Pilones.
A los que se accede cruzando la garganta por este puente.
Es en esta época de crecidas cuando el agua erosiona el
granito formando unas marmitas gigantes.
Los remolinos que se crean van escavando en círculo y
dejando el granito pulido.
Lo que en verano es una zona de baño y relax, es ahora un
auténtico reto impensable.
La fuerza con la que baja el agua y el ruido que produce te
transmiten una sensación especial.
Después de Los Pilones volvemos al bosque encantado en el
que con tanta humedad el musgo lo tapiza casi todo.
El agua fluye por todas partes en cascadas que se precipitan
desde las alturas.
Para formar torrentes que se van sumando en el fondo de las
gargantas.
Caminar por estos valles es un verdadero placer.
Pasamos sobre el puente Sacristán y el refugio de
pescadores.
Sobre las ruinas de esta central hidroeléctrica, observar la
forma en flecha del muro y la anchura, era el desagüe de la turbina.
Esta es la salida del agua, realmente no son ruinas, nunca
se terminó de construir. Los vallejerteños la llaman la Casa de la Luz.
Un poco más adelante teníamos que cruzar la garganta del
collado de Las Yeguas, pero la cantidad de agua no lo permitía y nos tocó
remontarla, es salvaje.
Bastante más arriba conseguimos cruzarla para seguir la
ruta.
Luego cruzamos la garganta que baja del Cerro Carretas por
este puente tan pintoresco.
Le escogimos para posar por ser uno de los puntos más
lejanos de la ruta.
Remontamos la otra ladera y volvimos a pasar al valle por el
que discurre la garganta de Los Infiernos.
Esta la cruzamos por el Puente Nuevo, o puente de Carlos V.
Por aquí cruzó en su viaje desde Laredo a Jarandilla de la Vera.
Parece un milagro que no se caiga, apoyado en una piedra que
en su mitad pasa el agua por debajo.
Lo bueno de hacer esta ruta en este tiempo es la cantidad de
agua que corre por sus gargantas, que los árboles no te impiden ver el bosque,
que a través del bosque se trasparenta todo el paisaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario