Según subimos el puerto de San Isidro, pasado el kilómetro
39 dejamos el coche en la curva de la antigua carretera en el puente de Wamba.
Desde aquí parte el camino de Wamba por el que comenzamos nuestra ruta.
Otra vez cargamos con las raquetas porque iba a nevar mucho, pero las dimos otro paseo, poca nieve para que valga la pena ponérselas.