Hay días que parecen destinados a esperar a
la orilla de la chimenea que pase la marea, pero hay gente que prefiere
disfrutar de la marea desde dentro y no perderse nada de lo que pasa. Llovía y
las previsiones eran de que nevaría, quizás por eso nos presentamos allí.
Todo empezó con la celebración de 112 años cumplidos,
(a medias, no os penséis) con esa tarta de manzana que nos hizo Super Rocío que
estaba buenísima, energía necesaria para la empresa que nos proponíamos.