Antes o después llega ese día con el que soñamos los
montañeros, cuando llegamos a Torrestío los termómetros marcaban -11º y el
cielo estaba azul radiante. Bendito anticiclón.
Salimos del pueblo por el valle de Valverde remontando una
pista con un desnivel suave que nos conduce a una zona de praderas y majadas.