A pesar de la nevada que ha caído y en la esperanza de que
no fuese para tanto, nos presentamos en Fontún de la Tercia dispuestos a
coronar el pico Fontún.
Salimos de pueblo por un camino ganadero, cruzando por un
puente el río Fontún y aprovechando la huella que nos han abierto los
tractores.
Enseguida caminamos ya en dirección al que es nuestro
objetivo. En el valle hay nieve, pero no tanta como esperábamos.
Superada una granja, comenzamos a ganar altura en dirección
a la Peña el Gallo.
Entre la Peña el Gallo y este resalte rocoso está la entrada
a la canal por la que subiremos, el Fontún nos muestra su cara más bonita.
Poco a poco vamos superando resalte y recortando distancia
con la cumbre.
Este primer tramo de canal supera 350 metros de desnivel,
aunque en las fotos no lo parezca, lo que hace que las raquetas sigan en las
mochilas.
En la canal hay tramos que ya tienen bastante nieve, pero el
viento ha dejado zonas más limpias que nos facilitan la subida. Abajo dejamos
la Peña el Gallo.
Cuando alcanzamos el collado sobre la canal a 1750 metros la
niebla nos empieza a rodear para darle a lo que queda un ambiente invernal.
Desde el collado la nieve aumenta muchísimo, no está
transformada, pero si lo bastante asentada como para darnos la seguridad de que
no se moverá.
Abrir huella en algunos tramos fue todo un trabajo de técnica
y esfuerzo.
En otros había tanta nieve que tuvimos que utilizar los
espolones rocosos del borde de la canal para poder superarlo.
Con mucha tranquilidad fuimos superando escollos y abriendo
una huella segura, la canal desde el collado tiene 250 metros, pero se nos hizo
bastante más dura.
Ya en el final de la canal disfrutando de que afloja un poco
el desnivel, no tanto como parece en la foto, pero se agradecía.
Esta ruta en verano se puede hacer en tres horas subida y
bajada, a nosotros nos ha llevado cuatro horas alcanzar la arista.
La cima ni se ve, ni se deja de ver, hoy sólo es el sitio en
el que nos daremos la vuelta, hoy lo importante ha sido la subida y lo será la
bajada.
La foto es obligada para que conste en acta la ascensión.
Desde la cumbre del Fontún se divisan las cumbres más
importantes de León, Picos de Europa, La Montaña Palentina… hoy sólo vi un
grupo de montañeros desafiando al viento.
El día estaba empeorando por momentos, así que tocaban a
retirada.
Nos lanzamos por la canal para huir de la ventisca y para
ganar la tranquilidad que te da estar abajo en un día así.
El viento ha jugado mucho con la nieve y como siempre la ha
puesto donde ha querido.
El sol también estaba caprichoso e iluminaba sólo el trozo
que le parecía.
El Fontún quedó envuelto por la niebla, nosotros envueltos
en la satisfacción de haber conseguido pisar su cumbre en una invernal dura.
La montaña algunos días se empeña en esconder su belleza,
los montañeros entonces, sacamos lo mejor de nosotros para demostrarla que la
queremos. Y ponemos una pincelada de primavera sobre el duro invierno.
Fantastica actividad la que habéis hecho. Imagino la dureza de la ascensión con tanta nieve. Nos la apuntamos para un futuro próximo. (espero que me deje el pie). Un abrazo Goyo. (Susi y Pedro)
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